El agotamiento personal, la gran renuncia.

Estamos mucho más tiempo en el Planificar y Hacer que en Soñar y Celebrar. Planificar y Hacer nos consume energía. Soñar y Celebrar nos recarga de energía. Esto nos crea un desequilibrio energético. El ritmo de vida agota nuestras reservas energéticas.

Los estimulantes (drogas) y los incentivos (económicos) no son la solución.

La justificación ("Es lo que hay. No se puede cambiar"), la espera y el autoengaño ("Es temporal. Ahora lo tengo que hacer pero luego cambiaré") o echar balones fuera ("Es coyuntural"), tampoco son soluciones. Tan solo excusas.

El 54% de los trabajadores dicen no estar motivados por su trabajo, frente al 46% que sí lo están.

Necesitamos recargarnos de energía. 

El impulso del deseo. Lo que nos ilusiona, lo que da sentido a nuestra vida, lo que nos hace sentir autorealizados. Son fuentes de recarga de energía.

De todo esto nos hablan Bugui García y Nice Lazpita en estos videos:

  

  

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